Un desierto de erizos
encallando en mis extremidades.
la luna en el ombligo
se ha vuelto hielo seco,
fuego herido, entre mis valles.
No tuve más que un sol
y tú te lo llevaste.
no tuve más que un sol
y tú te lo llevaste.
Un barco de hojalata,
perdido en el océano y sin rumbo
viviendo en esta herida
me siento un almanaque
sin presente y sin futuro.
No tuve más que un día
y se lo trago el mundo.
No tuve más que un día
y se lo tragó el mundo...

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