Me tienes entre la espada y un beso.

Sus palabras son como un maremoto que sacude el alma de cualquier mortal.

sábado, 13 de octubre de 2012

Tú, siempre, tú.

Siempre fuiste tú
contra mis fantasmas,
mis días grises , trastornados,
mis agujeros como desorientados molinos de viento,
mi gravedad cero,
mi extrema urgencia,
mi taciturna insanidad,
mi necesidad de hablarle aún a las piedras.

Siempre fuiste tú
contra mi incapacidad de ver
más allá de mis propios laberintos
Y yo, pájaro sin ojos
volando a ciegas indefenso,
envenenando cielos,confiado en sus cicatrices.
Y yo, torpe yo,
huyendo de mí,
de lo que me falta
Y lo que me falta
eres tú.

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