Soy
un barco averiadoaquí de este lado del mar que no pisas,
una nube de barro,
un eterno cigarro que se hace cenizas.
Todos los bemoles
sonando a destiempo por los meridianos,
y algo de tu nombre
cambiando el perfume de mi abecedario.
Algunos agujeros
queriendo llenarse con solo caricias,
destino incompleto,
calibrando el cielo desde mi cornisa.
Todos tus silencios
soltando mis miedos y atando mis manos,
Tú con tantas vidas ,
yo con medio sueño que me vuela a diario.
Si tú te quedaras más de dos segundos sobre mi costilla,
tal vez no perdiera cada nuevo aliento por la alcantarilla.
Soy
las ganas del cuerpo,
el amor sin boca, luz de cicatrices,
la sombra que busca
lejos de tu sombra los días felices.
Si tú me dejaras
más de dos segundos dentro de tu beso
tal vez no entendiera
cuanto de imposible hay...
en tus silencios
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