Cuando el dijo Adios...

Cuando el dijo Adios, yo ni siquiera estaba allí para despedirlo. Llegué y oí el silencio que dejó colgado como cuadros en todas las paredes del cuarto , ayer fuego y hoy un río de cenizas helado.
No esperaba que me comprendiera, aprendí tarde a no esperar nada más que las caricias de su mano, cuando llegaban disparadas a mi cuerpo mutilado.
Aún tenía el amor en los labios, el agridulce amor de los desesperados. Ese que se acobardaba entre mis senos para no desintegrarme entre sus brazos. El ya no estaba aquí, ni estaba allí, pero yo continuaba entumecida a un costado de la cama en donde hicieron nuestros besos un país... de dos afortunados.

 

Tanto.

Ocupas tanto espacio en mí que apenas si respiro.Tu nave es el silencio surcando mi cielo con una gravedad tangible.
Soy ese grito que te susurra el amor al oído, el beso a veces desencontrado buscando un espacio en tu boca.
Eres un universo de eternidades expandiéndote desde el fondo mío, acaparando mis rodillas hasta la punta de tus dedos. Un todo insostenible cuando soy muy poco y tú te vuelves infinitamente ...tanto.

Para querernos rotos.

Llegas tan pronto y te vas

que cada vez que estoy renaciendo me vuelves a matar.

Es tu instinto tal vez,

no se que haré conmigo ni contigo,

que aunque no estes estás,

que me haces depender de tu mirar ,

que ya no quepo ni en el mundo ni en mi mar...

Solo estoy viva si tus ojos

y aunque otros labios me llamen

solo en los tuyos reposo, y nazco y me incendio

y se que estoy viva en tu beso.

Hay tantos muros que saltar,

tantas distancias que extraviar,

tanto nosotros tan lejos, dando tumbos.

¿Será el día que dejemos de perdernos ?

o acaso es que nacimos para querernos rotos,

para amarnos con la fiebre de los enfermos,

desorientados, aniquilados...

No sé si estamos predestinados

o el destino nos disparó de lleno en el amor.

Pero a este río que es mi sangre ,saturado de tu nombre

no se le escapa una gota sin derramarte

y no se le escapa un día,

ni un segundo de la noche astillada ...sin amarte.

Mi problema es que te amo.

Mi problema es que te amo y mi amor no es una frase,

no cabe en un bolsillo ni en un escaparate.

No puede acomodarse entre los libros,

ni esconderse en argumentos,

no puede disfrasarse de domingo,

ni de lunes y mucho menos jueves.

No puede levantarse medio dormido

ni servirse con las tostadas de la mañana.

No puede enredarse entre tu pelo,

ni esconderse entre tus sábanas.

No suena, no hace ruido, no hace bulto cerca de tu cuerpo

y se cansa de tanto derramarse.

Se encoge en el hueco de la guitarra queriendo ser sonido.

Se vuelve lluvia y cascada y entonces piedra

y se desmorona como montaña .

No puede acomodarse en ningún sitio

porque siempre está inquieto

y se atropella y se hunde y se  muere ...

Queriendo nacer completamente cuerdo

se vuelve inexplicable y me sustenta

y me retiene y me aisla y me inunda y me puebla.

Pero de tanto ser, de tanto ser adentro mío

ya se está volviendo ...ingobernable.

Plegaria para mi soledad.

Revoloteando en el silencio 

paginas frías del amor

cuando se estanca en un pulmón

y quema el aire.

Abres la puerta de un suspiro

y entonces sale a caminar

por el borde de algún abismo

entre tus ojos y mi paz.

El mundo solo ha sido hecho

para tenerlo que cruzar,

pero los límites internos

son mucho más extensos , mucho más.

Ahora me invento una plegaria

para encender mi soledad,

le digo cosas al oído

por si ella decide escapar.

Aglutinándose en mi mente

llegan tus besos, sin control

enredan todos mis sentidos

armándose de algún temor.

Si no hay barreras que detengan

esta manía de avanzar

desnuda en medio de tu guerra

que nunca quiere terminar.

El mundo solo ha sido hecho

para tenerlo que cruzar,

pero los límites internos

son mucho más extensos , mucho más.

 

Algo más que un sueño.

Tengo ganas de arrancarme el corazón

y dejártelo en la mano

si se quedara latiendo.

Beberme tu tormenta y el poco de luz

que queda en tus ojos

cada vez que despierto.

No quiero ser más un puñal , ni una herida brutal

creciéndole a tu pecho.

Prefiero ser un beso de ocasión, un esperarte en la estación

aunque talvez el viento...

no te traerá hasta mí. 

Me vuelvo una figura fantasmal, la ruta sin señal

donde vagan tus pasos.

Una simple y eufórica  mortal

muriendo sin remedio  

a la vera de tus besos.

Encañonada por la situación , arrinconada entre el amor

y el sueño de ser algo más que un sueño

..en vos.

Marzo.( canción)

El frío sabe así como la muerte,

acurrucándose en los labios

y todo está tan quieto,

terriblemente quieto

que espanta al calendario.

Marzo... se vistió de duendes

para encenderme estrellas en las manos

más solo me dejó este pedacito 

de hielo seco en tu nombre bordado.

Hilachas de la noche van quedando.

El cielo desconfía de mis ojos

amenazan con llanto

absurdamente humanos

se olvidan que ya han muerto.

Marzo ...nos ha vuelto rehenes

y se robó los puentes que inventamos.

Nos descosió los besos y en los labios

crucíficó un suspiro aventurado.

Marzo...se vistió de duendes

para encenderme estrellas en las manos

más solo me dejó este pedacito 

de hielo seco en tu nombre bordado.

 

Desproporcionados.

Mis senos ,de rodillas sobre tus piernas, perdieron el camino hacia tu boca.
El tiempo era un imán desorientado  jugando a esconderme entre las sombras.
Pero mi boca aún no te perdía, tenía a tu lengua atrapada en mi saliva
queriendo enfermarse por mi cuerpo.
Tu voz ,relamiendo mis oídos con despiadada turbulencia, provocando escalofríos .
Somos la noche perdiéndose del día,
el eco de un amor desproporcionado hiriéndonos la piel a besos .

Agazapado en tu trinchera.

Tú no sabes, no cabría en tu cabeza afiebrada de tanto tesón, de pensarte el mundo un precipicio; cuando acudo a descifrar lo que a simple vista no muestras y cuanto entonces me enamoro yo  de tu capacidad de misterio ,de esconderme detrás de tu boca, entre tus piernas, de hacerme regazo para tu doncella .
Cuando dibujas el dolor con una herida y te afilas las garras y te descubres entero con una falsa mueca, inevitable , yo me crispo en mil pedazos, estallo bailando entre cometas al son de tus planteos infinitos. 
Me callo, resisto, te aguardo aún  en mis grietas y te descubro , por más insondable que parezcas, te descubro con los labios sedientos de mi nombre , agazapado en tu trinchera .

Mi carne se vuelve arena sin tus manos,
mis piernas desobedecen al abrigo de la noche
llamando enloquecidas a tu sombra.
Agitándose en las sábanas heridas de muerte buscan tu boca,
con la sed perpleja  de mis cantos.
Necesito el montaje de tu lengua sobre mis senos, 
la dureza de tus dedos sosteniendo mis caderas,
poseyendo mi cuerpo nacido para acabar en tu sexo.
Abre el misterio encerrado en mi pelvis ,
que aguarda entre desvelos y silencio
la perfecta agonía de ser devorado.