Me tienes entre la espada y un beso.

Sus palabras son como un maremoto que sacude el alma de cualquier mortal.

domingo, 29 de enero de 2012

Contigo aprendo la felicidad.

Debo aprender de tus ojos a mirar,
de tus sueños a soñar,
de tu beso a renacer... 
De tus días a brillar
y olvidar la obscuridad 
que fui una vez.

Debo aprender  de tus pasos a seguir
de tu espíritu a sanar,
de tu risa a sonreír.
De tus horas a esperar
y por una vez llorar 
de tanto ser feliz.

Si me hago sombra es de tanta luz
tú sabes que el mundo 
no tiene compasión,
Llegas a mí a  decirme quien soy
y me vuelves tu amor.

Yo debo aprender de tus manos a intentar,
de tus brazos a abrazar,
de tu tiempo a recorrer
Y en tu alma encontraré 
un hogar para vivir
sin tenerme que esconder.

Si me hago sombra es de tanta luz
tú sabes que el mundo no tiene compasión,
Llegas a mí a  decirme quien soy
y me dejas tu amor.


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