Triste es darme cuenta que soy nadie para quien lo eras todo.
Soy de lejos.
Hay quienes especulan con la vida de los demás, como si acaso no fueran a perder igual. No hay juego limpio.
Sabrá la lluvia del cuerpo nuestro?
Vísteme con la sombra de tu beso.
Allí donde el tiempo nos traspasa o aquí donde el tiempo se detiene, siempre andamos perteneciendo.
La realidad queriendo volarme y yo siempre tan amarradita a tus brazos
Abrir la boca y darte el mundo.
Te dejaba la noche con mi nombre sediento en la boca.
Recuerdo cuando nos quedábamos sin aire antes y después de un nosotros.
Hubo una noche en que el silencio dejó de callarte.
Una canción, que se lance del ropero y me ventile el corazón; que me haga boca a boca la respiración...y me incube taquicardia.
Yo solo quiero que detengas el tiempo cuando estés en mis labios.
No me asustan mis mil soledades, mirándose unas a otras y sin atreverse a decir tu nombre.
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