Me tienes entre la espada y un beso.

Sus palabras son como un maremoto que sacude el alma de cualquier mortal.

sábado, 22 de septiembre de 2012

Hay una intimidad que padecemos...


Hay una intimidad que padecemos;
algo así como unos labios,
una piel encendida,
un par de senos
debajo de ciertas palabras
o agazapados en cualquier silencio
nuestro.
Una intimidad tras de los ojos
cuando nos mete la distancia tan adentro
que comenzamos a crecer por algún borde.
Y nos bebemos instantes
y nos burlamos del tiempo
y nos hacemos... un hogar sin muros,
sin ventanas.
Padecemos de este oxígeno
que viene a sacudirnos los pulmones
y a versar nuestros latidos,
Lejos.
Idos.
Quietos.
Mundos.
Juntos.

jueves, 20 de septiembre de 2012

Para encontrarte, he aprendido a caminar cada distancia

Lo que cuesta vale, quizás por eso hemos sido tan difíciles.


Triste es darme cuenta que soy nadie para quien lo eras todo.


Soy de lejos.

Hay quienes especulan con la vida de los demás, como si acaso no fueran a perder igual. No hay juego limpio.


Sabrá la lluvia del cuerpo nuestro?


Vísteme con la sombra de tu beso.



Allí donde el tiempo nos traspasa o aquí donde el tiempo se detiene, siempre andamos perteneciendo.


La realidad queriendo volarme y yo siempre tan amarradita a tus brazos


Abrir la boca y darte el mundo.


Te dejaba la noche con mi nombre sediento en la boca.



Recuerdo cuando nos quedábamos sin aire antes y después de un nosotros.



Hubo una noche en que el silencio dejó de callarte.


Una canción, que se lance del ropero y me ventile el corazón; que me haga boca a boca la respiración...y me incube taquicardia.



Yo solo quiero que detengas el tiempo cuando estés en mis labios.



No me asustan mis mil soledades, mirándose unas a otras y sin atreverse a decir tu nombre.

Sin usted.

Usted debería andar descalzo, no hacer ningún impertinente ruido al caminar no sea que 

alguna lo pudiera ver y quedara enmohecida para siempre; como yo que me quedé sin 

ojos un buen día, y de a poco sin cuerpo y sin manos. Sin unos labios para alimentarme de 

otra boca que no fuera la suya.


Me he tomado esta distancia como agua de los charcos sin entender bien para qué, hasta


 que comprendí que no eran malos los kilómetros, ni los días, ni los años. Que no hay 

tiempo que me separe de usted, quien ha tomado cosas verdaderamente innecesarias.

Se sonreirá por su linda vida pero espere, piense, considere que su perfume veneno, es un 

rifle de aire comprimido regalando balas por doquier. Pobre muchachas desvalidas, ninguna 

más que yo y sépalo muy muy bien!  Amarlo , atreverme a tanto habrase visto! que tan 

acertada estuve en el temer y aquí estoy, sin muerte, sin vida queriendo asomarme detrás 

de alguna sombra herida...sin quién, sin mí y sin usted.

See full size image

Empacándome.


No sé que está pasando,

comienzo a doblar las piernas, 

enrollar los brazos, 

apilar los labios como si  fueran míos.

Cepillo mi sombra, 

le saco lustre al piso por si encuentro tu rastro.

Ordeno el sin sentido por no aterrarme.

Llega la noche

y se vuelve una trampa cada hueco.

Y entonces me arropa este frío

el que me dejas,

listo para empacarme.

Agujero negro.


No escribo

vomito mis dolores

y expongo mis besos para que lleguen a tu boca.

Cuando el cielo se encapucha detrás de alguna sombra

y me crispa las ventanas

sangro letras.

O extiendo mi piel como una alfombra

para que te acuestes en ella.

Esto soy,

la estrella que nadie toca,

el agujero negro succionando tu alma

hasta el fondo

de mi universo.

Besándote la espalda.


Mirabas al mundo
y yo te miraba; 
caías por mis ojos todo el tiempo
a qué suelo llegarías sin mí?
Atada de pies y manos
tripa/ corazón.
La boca se me hizo noche 
y el diablo a un lado
desordenando sentimientos sin permiso,
todos a tu alrededor.
Caí en todas las trampas del destino,
me hundí en el deshielo de tu boca
y jamás pude regresar.
Pero me vi tan lágrima,
tan soledad,
tan injusticia,
tan conjuro de verbos mal dormidos.
Que comprendí, al fin comprendí
-besándote la espalda-
que esto
nunca podría ser amor.

No más que tú.


jueves, 6 de Septiembre de 2012
Si,
tal vez estoy muy perdida
y me arañe la noche
y estos pétalos que vuelan a mi alrededor
no lleguen nunca a tocarte...
Y caigan gotas desde mis ojeras 
como negras lágrimas sin nombre.
Tal vez dure la muerte en mis besos
y se quede agazapada entre  mis sábanas
y se trepe a mi rostro
y me venza algunos sueños,
no más que tú.


domingo, 16 de septiembre de 2012

Un cielo en movimiento.

Me parió este mar; herida de sal abierta; 
labios azules;
senos de arena y fuego,
desiertos,
sin tu orilla.

Para quién.



Y para qué me habrán hecho tan humana,
tan fácil de romper,
tan vuelo furtivo y paso mal dado,
tan caricia fresca , flor de piel.
Tan beso herido
y ojos cerrados.
Tan sábado, domingo
y ni una vez
naciéndole a tu cuerpo,
mis dos piernas
como guirnaldas
enredándose.
Y para qué me habrán hecho
tan sendero...
si nunca me caminarán tus pies.
 

miércoles, 5 de septiembre de 2012

La lágrima en el café.


Descansaba el ramo de margaritas sobre sus piernas. Se secó una lágrima y otra cayó al café. Dejó la taza sobre la mesa y lo miró tan fijamente a los ojos que él sintió un escalofrío subiéndole por la espalda. 
—Tengo algo que decirte —argumentó ella 
—Pues....bien? —respondió él con miedo a responder. El timbre de su voz se oía amenazante.

La mesa estaba llena de reglas y escuadras, la taza de café humeante , un vaso con sabor a aún no se acabó y algunos libros que hablaban muy bien de que se yo.
—Tú quédate tranquilo mientras te explico... Lentamente se levantó de la silla y tomó posición.
De repente comenzaron a caer las reglas de la mesa,
luego las escuadras,
las tazas, los libros , el mantel, todo hacía un ruido estrepitoso. El estaba paralizado, sus ojos parecían no terminar de abrirse nunca, el tono de sus mejillas era de un rosado rojizo púrpura violacio....
El gato dijo miau así que por las dudas ella lo escondió detrás de la ventana, para que no interrumpiera su labor. Continuó "inexplicando" mientras se quitaba los zapatos.
—tú comprenderás bien, yo hay cosas que no sé decir de otra manera y que necesito imperiosamente que comprendas, del verbo com pren der ...se entiende?
—Si, si .( dijo él)
Caía el vestido con gracia indescriptible , más que nunca las ganas de acariciar el suelo.
Vértigo sentía él mientras la silla resvalaba por el aire. Entonces la mujer se le acercó y tomó su camisa, arrancando toditos los botones, las mangas corrieron asustadas no sabían por dónde!!!
Esos corazones latían tan fuerte que ninguna palabra parecía más importante.
Ella lo miró tan contundente,
se sentó sobre sus piernas ,
apoyó frente con frente,
nariz con nariz,
caricia por caricia,
beso por beso, nudo por nudo, manos, dedos, piernas / SUELO!!!
Todo era un lío interminable, aunque en ese momento no importaba mucho.
Se contoneaban suavemente cadera con cadera,
beso con beso,
lengua tras lengua,
abrazos por segundo. TODO! y gemidos, aire , afixia, gritoooooos! y luego, risas, miradas terciopelo.
Nubes,
ojos...
lluvia...
Suspiro. —Sabes ? —dijo ella.—Ahora lo sabes bien AMoooR? Si quieres ME voy, pero solo necesitaba tanto, tanto que lo supieras...
Dany Tomé.

Buscándote horizonte.


No me encuentro
ni te encuentro, 
en este muro que hoy soy.
Cuando desato mi sonrisa y escupen balas
no comprendo bien en cual guerra estoy.
Tal vez porque antes de gatear probé mis alas
y antes de arrepentirme se partió mi cara.
Quizás por eso estoy
durmiendo boca abajo  e inventandote mi amor.

No me escondo
ni te escondo,
algunas veces me voy.
Siempre hay algún abismo que no tiene fondo
y saco mi muralla de abajo del colchón.
Por esta vez la lluvia se volvió nostalgia
y todos mis tesoros se me hicieron agua;
quizás por eso estoy
enhebrando mi vida en este colador.

Tal vez hasta tu cama llegue mi penumbra,
quizás el laberinto no se acabe nunca
y por eso estoy
buscando el horizonte aquí en mi corazón.
y por eso estoy
buscándote horizonte aquí en mi corazón.


lunes, 3 de septiembre de 2012

‎...


Yo no soy tu…
Tú no eres mi…
Solo somos este

Quién sabe, dónde, cuándo
buscándose por todas partes.
Un río creciendo a contramano del mundo;
manojos de sonidos y silencios;
miradas ciegas, crepusculares;
sobredosis de palabras inyectadas como besos
que se muerden por ser carne.
Tú no eres mi…
Yo no soy tu…
Y sin embargo
nos llovemos un mientras tanto
y los relojes nos corren detenidos.
Nos negamos tantas veces como a Cristo
Y aunque no nos miramos
¿nos quita quién de los ojos?

Tú no eres y yo no soy
Y porque no lo necesitamos juntos
nunca tendremos un nombre.