Me tienes entre la espada y un beso.

Sus palabras son como un maremoto que sacude el alma de cualquier mortal.

sábado, 30 de mayo de 2015

Qué sabrán del mar los que no han dejado que la sal perfore sus dedos.

Me fui. 
Cuando llegues dile a todos que nunca me has visto 
y que siempre alucinaron mis ojos.
Todo.

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