Ay de ciertos días
tan necesitados que
sin dudar me arroparía
entre tus brazos para que
me cuenten el final
de cualquier cuento
que termine en un beso
que no termine.
Y ver pasar un avión
desde tus ojos
y saber que ya volé
el primer día en que te vi.
Y que quepas en mis pasos
aunque sea pequeños
y que todas las palabras
sólo brillen en un silencio.
Hay de ciertas noches
tan despojadas que
al dolor me amarraría
con tal de no caer
Que la desesperación
siempre grita tan fuerte
y yo busco oír tu voz
para saber que todo andará bien.
Y que de nubes gastadas
no se nuble nuestro cuerpo
y si es que temblamos juntos
que ya no sea de miedo.
Y que te ciñas a mis manos
aunque sean más débiles,
que sepas que mi palabra
es todo lo que soy.
me cuenten el final
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